
El evento contó con la asistencia de 170 ciudadanos en Lima y con un significativo número de asistentes en diferentes instituciones de las regiones de Arequipa, Ica, Piura, Puno y Tacna; quienes participaron mediante la modalidad de conferencia virtual.
Los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) fueron adoptados en la Cumbre del Milenio del año 2000 por 189 países, quienes se comprometieron a alcanzar para el 2015 los 8 objetivos con el ánimo de mejorar la calidad de vida de las personas mediante una agenda de gran importancia para promover el Desarrollo Humano.
La primera exposición estuvo a cargo de la Ing. Naldi Carrión, quien indico que Los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) han sido una gran experiencia mundial por el consenso político que suscitaron en torno al compromiso de alcanzar unos niveles mínimos reconocidos como imperativos para el desarrollo humano y por haberse constituido como un referente para evaluar el desarrollo alcanzado por muchos de los países signatarios, así como por las diversas alianzas que se han propiciado en torno a su alcance. Sin embargo, aclaro que el alcance de las metas ha sido desigual, tanto entre países como al interior de éstos, lo que impone un desafío: continuar en la apuesta de cerrar brechas, y por otra, hacer sostenibles los logros alcanzados y trascender hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible ODS, en cuanto a las transformaciones requeridas en las diferentes sociedades que aún no logran garantizar para todos/as el ejercicio efectivo de los derechos.
Por otro lado el Ing° Jorge Alvarez, manifestó que la Asamblea de la ONU, en septiembre del año 2015, se propuso un nuevo compromiso mundial para adoptar 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) por parte de todos los países signatarios, no solamente por los países en desarrollo, pues se incorporan objetivos que permiten reducir las desigualdades poblacionales y territoriales y cuidar el planeta, considerando los ámbitos social, económico y ambiental. Sin embargo, al examinar el comportamiento entre el sector urbano y rural, así como entre ciudades capitales, las brechas siguen siendo enormes. Una mirada de la pobreza más allá del ingreso, se puede tener mediante el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), el cual confirma la distancia entre los logros urbanos y la persistencia del rezago rural. Al examinar el IPM, se aprecia cómo las dimensiones que más explican la pobreza están asociadas a las oportunidades de educación y de empleo, dos de los factores que hay que enfrentar para reducir la inequidad.
